EL RIEGO: Las Hidrozonas

EL RIEGO: Hidrozonas.

Hecha la introducción, vamos a tratar los aspectos estructurales que influyen en el correcto aprovechamiento del agua en el jardín.

Tres aspectos relacionados entre sí son las hidrozonas, la elección de especies y la mejora de las propiedades del suelo.

 

Hidrozonas:

• Una hidrozona, es un área del jardín con unas necesidades de consumo de agua determinadas. Estas necesidades de agua, vienen determinadas por los otros dos aspectos, es decir, por las especies que hay plantadas o vayamos a plantar, y por las propiedades físicas del suelo (ver enlace Propiedades Suelo).
• Por ellos, digamos que a la hora de diseñar o de plantar nuestras especies, deberíamos agrupar estas por sus necesidades hídricas ya que a la hora de aplicar agua a estas zonas, influirán sus necesidades hídricas, lo que puede influir en el correcto desarrollo de las especies.
• Así pues, podemos enumerar las hidrozonas como de alto, medio y bajo requerimiento de agua.
• Este punto lo podemos resumir como "no plantar tulipanes junto con aloe vera".

 

Elección de Especies:

• Le elección de las especies a plantar, resultará esencial tanto para el diseño de las hidrozonas, como para la cantidad de agua que consumirá el jardín.
• Deberemos elegir especies con bajos requerimientos hídricos que aseguren el éxito del jardín en épocas de escasez hídrica.
• Lo más recomendable es hacer uso de especies autóctonas, que en contra de la creencia popular, son más numerosas de lo que se cree y cuyo valor ornamental puede estar a la altura de cualquier otra.
• Si incluimos zonas de césped en nuestro jardín, deberemos elegir aquellas con requerimientos hídricos bajos y que se adecúen a nuestra zona climática, y siempre limitando su uso a zonas concretas de nuestro jardín.

Mejora de las Propiedades del Suelo:

• Una elección y agrupación de especies correcta se puede ir al traste con unas propiedades del suelo no ideales o defectuosas para dichas especies.
• como ya explicamos en los artículos de propiedades del suelo, según el tipo de estructura, variará la infiltración del agua o su capacidad de retención de agua.
• Por ello el contenido de materia orgánica en el mismo puede influir tanto en la fertilidad del mismo como en la capacidad de retención de agua, así como contribuir a la estabilidad del mismo.
• Otro aspecto importante es la profundidad del suelo ya que digamos que será la "zona útil" en la que se desarrollarán nuestras plantas y además influirá en el volumen de agua que será capaz de almacenar.
• Si las propiedades del suelo, no fueran las deseadas, podemos aplicar enmiendas, las cuales están destinadas como su nombre indica, a corregir dichas propiedades.
• Estas enmiendas pueden ir destinadas a aumentar el contenido de materia orgánica (estiércol y turbas), enmiendas calizas (aumento del pH), o empleo de turbas (reducción del pH).

En próximas entregas, trataremos algunos de estos aspectos en profundidad, sobre todo a lo referente a la elección de especies, e intentaremos desterrar algunos mitos sobre especies de plantas que son descartadas a la hora de diseñar jardines o que se utilizan erróneamente.